Hoy es el último día del 2015, estoy muy agradecida con Dios por todo lo que me permitió vivir, ha sido uno de los mejores años de toda mi vida, con sus altas y sus bajas, viendo el final del mismo fue maravilloso. El comienzo del 2015 estuvo lleno de muchos cambios y uno de ellos afecto mi vida de manera drástica, una pieza importante se me perdió y no la pude volver a encontrar, fue devastador vivir todo ese proceso, sin embargo con la ayuda de Dios pude lograr salir adelante. Conocí muchas personas hermosas de las que sé que formaran parte de mi vida por mucho tiempo por no decir que de toda la vida, sin embargo el apoyo de mis viejos amigos fue una parte fundamental para levantarme de donde estaba. Fue un año en el que disfrute hasta más no parar, viaje, conocí nuevos lugares y muchos de mis sueños se cumplieron. A nivel laboral estoy orgullosa por lo que pude lograr, por los nuevos proyectos que pude crear por mí misma y por el desarrollo de los mismos.
Diario de una pequeña escritora