- Mi felicidad es estar a tu lado (Napoleón Bonaparte).
- Ven a reunirte conmigo, para que, al menos, antes de morir podamos decir: fuimos felices tantos días (Napoleón Bonaparte).
- En la separación, el que se marcha sufre menos que el que queda detrás. La distracción del viaje, el cambio de escenario, el paisaje, el movimiento, quizás incluso la separación, distraen la mente y alumbran el corazón. Pero el que se queda atrás está rodeado de las mismas cosas, mañana como ayer, solo que falta quien me hizo olvidar que el mañana existe (Lord Byron).
- No tengo otro placer que pensar en ti, pero no veo como podría visitar de nuevo los lugares donde hemos estado juntos, especialmente aquellos más consagrados a nuestro amor, sin morir de pena (Lord Byron).
- No he querido volver a amar, ni he esperado recibir amor. Tú has hecho volar todas mis resoluciones, ahora soy todo tuyo, seré lo que tu desees (Lord Byron).
- Tú has sido mía y, cualquiera que sea el resultado, soy, y eternamente seré, completamente tuyo
(Lord Byron). - Tengo que escribirte una o dos líneas y ver si esto me ayuda a apartarte de mi mente por un tiempo siempre tan corto (Jonh Keats).
- No puedo existir sin ti, me olvido de todo salvo de verte otra vez, mi vida parece pararse allí (Jonh Keats).
- Podría ser martirizado por mi religión; el amor es mi religión (Jonh Keats).
- Mi credo es el amor y tú eres su único principio (Jonh Keats).
-La felicidad no se compra. Tampoco se deriva de un proceso lógico o matemático de sumar tus logros, tus bienes, tus relaciones o tu posición en la sociedad. - La felicidad se siente, no se piensa. -Cuando uno se equivoca, o cuando las cosas no nos salen bien, uno no tiene por qué sentirse inútil, tonto o culpable. Uno debe entender su error, aprender del error y buscar otras alternativas sin dudar de su autoestima. -Todo lo que retienes se mantiene. A todo lo que te aferras, te esclaviza. -A medida que tomes más conciencia de tus conductas, tendrás una mayor capacidad de mejorar. -Cuando una persona está en una cueva subterránea y no encuentra la salida, se desanima y desiste de intentarlo. Pero si en su búsqueda escarba y encuentra un mínimo haz de luz. -El verdadero objetivo de la empresa es ofrecer un entorno que te permita, tanto a ti como a tu personal, realizarse, crecer, aprender, desarrollarse. -La rentabilidad y el dinero son un medio y no el fin en
Comentarios
Publicar un comentario